Durante mucho tiempo ciertos historiadores, periodistas y políticos han insistido en afirmar que Cataluña antes de 1714 era un estado independiente, y que España no existía ni como entidad política ni como entidad espiritual o cultural, sino que era un concepto meramente geográfico. El estudio de la historia y de muchos documentos nos dicen, sin embargo, que la realidad es muy diferente. Aunque el título oficial de los monarcas hispánicos era “reyes de Castilla, León, Aragón, Valencia, condes de Barcelona, etc”, numerosos documentos, impresos y monedas certifican que ya desde finales del siglo XV a esta entidad política se la denominaba España (o Españas como se decía entonces). Y tanto los habitantes de estos territorios fuesen castellanos, catalanes o aragoneses, como muchos políticos y cronistas extranjeros no dudaban que España existía como sujeto político a todos los efectos. Como muestra solo daremos algunos ejemplos.
Cuando Colón volvió de su primer viaje a América a principios de 1493 escribió su famosa carta, que hizo imprimir, en la que anunciaba al mundo su gesta. Pues bien, en el preludio se hablaba del rey Fernando el Católico como “Ferdinandi Hispaniarum Regis” (Fernando, rey de las Españas). En 1585 los dirigentes municipales de Perpiñán, en la actual Cataluña francesa, escribieron a las cortes de Monzón diciendo que “Entre les moltes províncies compreses en los regnes de Spanya esta província del comtat del Rosselló y la terra de Conflent (…) en la qual són més necessàries que en tot lo restant de Espanya, ço és en Perpinyà, frontera de França… dita vila, la qual és la primera de Espanya”. Si España era una mera idea geográfica equivalente a la Península Ibérica … ¿Cómo podían afirmar los síndicos que Perpiñán era la primera ciudad de España, si ésta se encuentra al Norte de los Pirineos? Está claro que para los perpiñaneses España era un sujeto político del que se consideraban integrantes.
En 1600 el jesuita de Reus Pere Gil escribió la obra “Història natural de Catalunya”, en la que al empezar afirmaba: “per ser sols la nostra intenció de escriurer las cosas de Cathalunya, la qual com sia provincia de Espanya…”. O sea, este erudito catalán consideraba que el Principado era una provincia de España. ¿Cómo podría haber afirmado eso si Cataluña hubiese sido un país independiente y ajeno al conjunto político hispánico? Más. En la Cataluña previa a 1714 ya se publicaban libros en castellano y en algunos de ellos se hablaba del rey de España, no del rey de Castilla y Aragón. Por ejemplo, en 1625 se imprimió en Barcelona, en la imprenta de Sebastián de Cornellas el libro “Historia de la vida y hechos del emperador Carlos V, máximo, fortíssimo, rey cathólico de España y de las Indias, Islas y tierra firme del Mar Océano”.
Hay otro aspecto importantísimo y a menudo pasa desapercibido. Se trata de las leyendas que figuran en las monedas que acuñaban estos monarcas y que circulaban por sus territorios. Pues bien, resulta que algunas de ellas se fabricaron en Barcelona, lo que sería inimaginable si el Principado hubiese sido un estado soberano desvinculado de la corona española. Por ejemplo, en 1596 se acuñó en la ciudad Condal una moneda de ½ cruzado, tipo 35. Se puede leer la leyenda HISPANIAR(VM) en una cara e HISPANIA en la otra. Más ejemplos: monedas de 2 reales, tipo 5, acuñadas en Barcelona entre 1707 y 1714. En el anverso se ve el escudo de la monarquía española (armas de Castilla, León, Aragón, etc) con la leyenda CAROLVS III D.G. (DEO GRATIA) y en el reverso HISPANIARVM REX 1707. Y por falta de espacio no seguimos más, pero los ejemplos son incontables, inacabables e irrefutables.
Buenas noches,
y si lo publicáis en las 2 lenguas y nos enteramos tod@s. Gracias
Buen comentario…
No estaría mal que lo publicase en español y en gallego..
Así nos enteraríamos todos.
España i Hispania nada tiene que ver! .. solo el parecido de su nombre.
la península hispanica existe quando los griegos entraron por Ampurias. i el invento de España fue entre 1701 a 1716.
la universidad UAB, aplica la Història manipulada del estado español. La verdadera lleva tres cientos años censurada.
– Das a entender que la visión geográfica de España es algo moderno, cuando es absolutamente falso.
– Mencionas textos antiguos que hablan de España en sentido político, es cierto, pero no entras a contextualizarlos: quien los escribió y a que o quien se refieren concretamente.
– Utilizas significados modernos para palabras que han cambiado su significado con el paso del tiempo. Una Provincia, aún en el Sg. XVII era una “parte de tierra extendida”. ¿Hispania? vamos…, nada que ver… ¿intentas comparar una monarquía compuesta con la España actual?
El hecho es que mientras en un lado de la península, la ocupada por los reinos de la Corona de Aragón se entendía “España” como mera denominación geográfica, siendo por tanto todos españoles, sin sentido político, siendo cada uno Aragonés, Catalán, Valenciano, etc… en Castilla les encantaba usar esta denominación para sí mismos por creerse herederos, sólo ellos, de una idealizada “Hispania Gótica”, cosa que en los otros reinos, los de la corona de Aragón, no entendían ni aprobaban. Aún así nunca existió ésta (España) como denominación política formal, dividiéndose siempre la España geográfica en sus diversos reinos y soberanías (las Españas), y sin existir el título de “rey de España” (el primero en ostentarlo fue Amadeo de Saboya), intitulándose siempre como reyes de Castilla, Aragón, etc…
Escribía Andreu Bosch en 1628: «Valdrá también, para satisfacer a un error comúnmente recibido, y vanagloria usurpada por los castellanos, que en las naciones extrañas, en paz y en guerra, se denominen Españoles, tomando solo por España Castilla, lo que no se puede fundar con razón, sino que es de burla, por cuanto España es todo lo que comprende de los pirineos a los océanos, incluyendo 17 provincias, entre los cuales hay 12 reinos, Castilla antigua y la nueva, León, Valencia, Toledo, Galicia, Algarbes, Murcia, Córdoba, Aragón, (…) y otros títulos de Principados, condados y otros, todos los cuales son tan españoles los unos como los otros… Al que diga que los reyes de León y Castilla, cuando lo eran solamente de dichos reinos, se denominaban reyes de España, ya responde Gaspar Escolano (…)»
Y lo Escolano escribía, ya en 1610: “No embota la lanza que los reyes de León y Castilla se llamasen de España, cuando solo lo eran de estas dos provincias; y aun cuando no lo eran más que de León y de Asturias. Porque no dio ocasión a este título el ser España solamente a León y las Asturias (que a esta cuenta ni Castilla fuera España) sino porque el primer rey que alcanzaron en las montañas, después de la pérdida della, se quiso llamar deste nombre, por parecerle que a él le pertenecían los derechos de último rey Godo Rodrigo (…) Mirando todo esto, no puedo dejar de dolerme de la impropiedad del hablar del vulgo castellano, que con ser su provincia una de las hijas de nuestra España citerior (…) se levanta a mayores (…) llamando a sola Castilla España y a solo los castellanos Españoles. Ignorancia es esta tan pueril, que merece ser condenada a risa (…)”
Estas visiones enfrentadas propiciaron la aparición de una dualidad político-geográfica del término e incluso la de una diferenciación España-Cataluña:
• En el siglo XIII el franciscano occitano Matfre Ermangaud de Béziers al hablar de Pentecostés a su monumental poema «Lo Breviari d’Amor», dice que, cuando muchas gentes «de todas las naciones» escucharon de boca de los apóstoles sus respectivas hablas, se maravillaron de gran manera, por cuanto había «de Proença e de França, d’Englaterra, de Gascuenha, d’Espanha, de Cataluenha, de Flandres e de Bretanha…».
• Crònica de Bernat Desclot (cap. 85): «En la cort de Roma hi havia dos honrats clergues de Catalunya e de Spanya».
• Salvoconducto del rey Eduardo III de Inglaterra a los «mercatores fideles de partibus Ispaniae, Catalonie et Majoricarum».
• En Brujas (Flandes), los mercaderes considerados de «nación española» eran los castellanos (y los vizcaínos, que más tarde se separaron) mientras que los catalanes eran de la «natio Cathalana».
• En Roma la iglesia de Santiago de los Españoles aglutinaba básicamente a los castellanos, mientras que los naturales de nación catalana disponían de la iglesia de Santa Maria de Montserrat.
• El canciller de Castilla y escritor Pedro López de Ayala, a su obra «Rimado de Palacio», opone catalán a español, francés, inglés, lombardo y escocés.
• El poeta francès François Villon opone les catelennes a les espagnoles, grecques, egiptiennes, allemandes, etc…
• En la Crónica de Muntaner se dice en relación a las comunicaciones que se puede hacer la vía de Barcelona yendo de Narbona en Barcelona, la vía de Tortosa retomando el curso desde Barcelona a Tortosa y, a continuación, la vía de España al proseguir hacia el sur del litoral peninsular, «i hom també pot batre tot Principat, e Plaja Romana, e la ribera de Pisa, e de Gènova, e de Proença, e Catalunya, e Espanya e Barbaria».
• En la Crónica de Pedro el Ceremonioso cuando el cardenal Bernardo de Albi llega a Barcelona procedente de Castilla, se dice que había venido de España.
• En la Crónica de Pedro el Ceremonioso en relación a una posible invasión benimerí del rey de Marruecos se dice que hay preocupación por la llegada del rey Benamerí a España, lo era entendido por conquistar toda España y el reino de Valencia.
• Martín de Alpartil en su «Chonica actitatorum» dice en diversas ocasiones Yspani et Cathalani cuando se refiere a los reinos de Castilla y Aragón como a sujetos.
• En una comisión arbitral formada en Londres en 1303 para solucionar las disputas entre Felipe el Hermoso de Francia y Eduardo II de Inglaterra, figuraban, junto con los representantes de obispos, nobles, villas y puertos, «differents autres habitants de Genes, Catalogne, Espagne, Germanie, Zélande, Frise, Danemark et Norvège».
• También el rey Eduardo II, en una carta de privilegios a los extranjeros subraya que «Circa bonum omium mercatorum subscriptorum Regnorum, terrarum et Provinciarum; videlicet Alemaniae, Franciae, Ispaniae, Portugaliae, Cathaloniae, Ducati nostri Aquitaniae».
• En una tregua entre Eduardo III i Felipe de Valois el 1340, se dice: «Et soient auxit compris dins les dites treves, ly Espagniel, ly Catelayn, ly Genoveys, ly Provincial, ly Esvesque…».
• En la edad media, en relación al derecho o normas jurídicas, se distinguía entre las «Costumas de Catalunya» i el «Costum d’Espanya» (entendiendo por España las Partidas castellanas).
• Francesc Eiximenis, en «Como usar bien de beber y comer». Normas morales contenidas en el «Terç del Crestià»: catalans e spanyols beuen en grans taçes. Moros en cantarells pochs, e d’un cantarell beuen tots. Francesos beuen en gobellets pochs o petits.
Lo cierto es que ni Castilla (España) ni los reinos “asimilados”, han compartido, a lo largo del tiempo, los mismos valores, ideas, vocabulario, (ni evidentemente idioma), ni el mismo punto de vista histórico… Pero cuando uno de ellos impone sus valores, ideas, idioma, vocabulario e historia a los demás, pasan estas cosas…
Creer que Espana no existia antes de 1714 ya es una frivolidad sin nombre. Y creer que cataluna es una nacio lo es aun mas !
Pandilla de «Haters»!
Catalunya és una nación des de el año 998 en que el conde Borell II reunió todos sus condados i formó el Principado de Catalunya. De España ni se hablaba. Por lo tanto Catalunya fue independiente durante 8 siglos,hasta que el borbón Felipe V, gràcias a la ayuda de su abuelo francès Luís XIV, pactó la rendición de Barcelona. Por cierto, Felipe V no cumplió ninguno de los pactos que suscribió. Entró a matadegolla i suprimió todas las leyes de Catalunya, incluido el uso de la lengua catalana.
Completo: Catalunya fue indendiente durante 8 siglos hasta el 11 de setiembre de 1714